Las mujeres perfectas: belleza y feminidad
Joanna y Walter viajan en su auto con su dos pequeños hijos. Pretenden alejarse del ruido de la gran ciudad y deciden asentarse en el suburbio de una pequeña localidad. Ante ellos se presenta un panorama cautivador, de una belleza incuestionable. Amplias avenidas, casas rodeadas de bellos jardines, sin bardas ni rejas. Al frente de cada casa una mujer encantadora, portadora de una rubia cabellera, con un maquillaje perfecto, un lindo vestido en color pastel, con delantal y zapatillas de tacón alto. Una de ellas riega el jardín, otra juega con los niños, alguna más recoge la correspondencia del buzón. Llegaron a Stepford, el lugar de las mujeres perfectas. Por el camino rumbo a la que sería su nueva casa no se ve a ningún marido, solamente las esposas sonrientes volteando a su paso y saludando amablemente. Para ella fue curioso, para él maravilloso. Era el mundo ideal. Walter pronto se uniría al club de maridos felices y Joanna se percataría de que algo extraño sucedía con todas aquellas mujeres hermosas y obediente
(es una narración de un pasaje de filme a las mujeres perfectas cuya trama gira en torno a la feminidad, básicamente son mujeres que están siendo controladas por mecanismos electrónicos para hacer ver esa mujer perfecta y es similar su forma física y su forma de expresarse).En el siglo XIX se afianzó esta idea de la feminidad ligada a la belleza, la fragilidad y la delicadeza del cuerpo de las mujeres. Fue en un momento en el desarrollo de la humanidad en el que la civilización occidental impuso, modelos, estándares de belleza hacia las mujeres por ejemplo la reina egipcia Nefertiti se consideró que era una mujer extremadamente bella y cuya hermosura se alababa, una descripción de ella su cuello de cisne, una nariz de "rara armonía" y unos labios carnosos perfectamente dibujados.
Las sociedades contemporáneas caracterizada por una perfección en la parte física de cuerpos bellos y saludables, de modelos de belleza tanto para hombres como mujeres en los que se desconocen y se excluye cualquier tipo de diferencia se ve mucho los patrones de discriminación como racial,discapacidad y por supuesto los los que no cumplen esos estándares que suelen ser personas con cabello rubio, ojos claros, blancos, delgados, cosas así que lo hacen ver atractivo hacia la sociedad... Alcanzar y sus dichos estándares de belleza y para conseguir ese cuerpo perfecto esa persona perfecta son unos objetivos muy fundamentales de la existencia de los sujetos "ahora se debe luchar por controlar la obesidad, mantener la piel firme (sin arrugas), no tener canas ,un montón de cosas que supuestamente que corregir para estar acorde al modelo" de ahí sale mucho la cirugía cosmética o estética en los sectores sociales sino los más significativos los relacionados con la auto-percepción de los sujetos.
Por otro lado sabemos que los sectores medios ha sido tradicionalmente grupos sociales con mayor posibilidades económicas y pues tiene más acceso a la información y medios masivos de comunicación asimismo seguir esta moda afectado a personas que tienen bajos recursos que por cambiar un aspecto físico lo único que están haciendo es arriesgar su vida pagando lo barato que la final les está cobrando muy caro, lo que convierte este fenómeno en un problema de salud pública.
Este breve ensayo lo que interesa mostrar es la importancia que tiene la mirada feminista en el análisis y crítica de las de las concepciones sobre la belleza que caracterizan a la sociedad contemporáneas,así como el conjunto de prácticas que materializan los cuerpos de las mujeres en términos de patrones de perfección exigidos,en particular a un duelo cirugía cosmética en tantos dispositivos de control de las mujeres que producen sujetos de género.
La autogestión corporal ¿un espejismo?
Delgadez, belleza, flexibilidad, agilidad para el trabajo y para el placer, soles metas individuales de quienes toman el cuerpo en sus manos. Decidir sobre sus cuerpos es arbitrar sus propias vidas. Es un mensaje de los filmes más emblemáticos de la década de los 80... Flashdance (1983) muestra, parafraseando a Alejandra kollontai (1972) a la mujer nueva y la moral sexual que se pretende reconocer hacia finales del siglo XX poseedora de un cuerpo que ella misma controla. Se desarrollen la cia industrial de Pittsburgh en USA, donde la protagonista es una chica que arduamente trabaja para ganarse la vida, ella vive sola, es independiente, no requiere a alguien para satisfacer sus necesidades ,su gran deseo es ingresar a una reconocída academia de danza y exige su cuerpo sin falso pudor ejercicio ,sexualidad libremente... Esta nueva mujer es la que se hace a sí misma.
"sociedad preparada y alienta a los individuos para procurarse un cuerpo que ostente juventud, delgadez y sensualidad; en tanto de rechazar el cuerpo decadente, envejecido o discapacitado."
... Las experiencias corporales de las mujeres, han sido exploradas desde las prácticas más cotidianas de belleza y sus tratamientos de adelgazar poniendo fuego su salud con los desórdenes alimenticios causandose bulimia y anorexia, estudios culturales desde perspectiva feminista han promovido la investigación sobre la representación del cuerpo femenino en el cine y en la televisión mostrando al mundo mujeres con un cuerpo clamorosamente opulento, imposiblemente Delgado e invariablemente blanco.
En nuestras sociedades actuales, la búsqueda de la belleza y la perfección ha desplegado una de las industrias más exitosas. Los cosméticos, los tratamientos, las clínicas y salas de belleza, llamadas "estéticas", así como las modificaciones faciales y corporales, son constitutivas del dispositivo de la corporalidad; son un conjunto de prácticas complejas que, por un lado, podemos considerar como alegorías de la reapropiación de los cuerpos y formas de expresión de la consabida auto-creación de la identidad, y por otro como mecanismos disciplinarios en el proceso de controlar los cuerpos. Es innegable la popularidad de dichas prácticas y el aumento de consumidores de este tipo de servicios, no obstante, la proliferación de intervenciones quirúrgicas encaminadas a modificar los cuerpos de mujeres y hombres en busca de la perfección y la belleza, generan algunos interrogantes: ¿Cómo definir el impacto de las modificaciones corporales en la identidad y subjetividad de las personas? ¿Hasta dónde, tales modificaciones, obedecen a las decisiones autónomas de los sujetos? ¿En qué medida podemos considerarlo un acto de normalización más que de embellecimiento?
Indudablemente, en términos de la modernidad, las modificaciones corporales implican un "desafío a la "naturaleza" y un triunfo de la ciencia y la cultura. Sin embargo, también revelan la paradoja de apelar a las normalidades establecidas desde la cultura, justificadas por un discurso de lo natural y lo biológico, es decir, las alteraciones a la corporalidad son un reto a los procesos de naturalización del género, podemos confirmar lo anterior al observar que las operaciones realizadas en los cuerpos de las mujeres, regularmente tienden a enfatizar, en las primeras, los rasgos de la feminidad, es decir, aumentar el tamaño de senos, de los glúteos y se afinan los rasgos faciales; en el caso de los varones, se aumentan los pectorales y bíceps, se aplican injertos en la cabellera o se aplican prótesis en el pene. Contradicción que se hace evidente en el caso de las operaciones de reasignación sexual que responden a la argumentación quienes se practican este tipo de intervenciones, de haber nacido "en el cuerpo equivocado".
Indudablemente, en términos de la modernidad, las modificaciones corporales implican un "desafío a la "naturaleza" y un triunfo de la ciencia y la cultura. Sin embargo, también revelan la paradoja de apelar a las normalidades establecidas desde la cultura, justificadas por un discurso de lo natural y lo biológico, es decir, las alteraciones a la corporalidad son un reto a los procesos de naturalización del género, podemos confirmar lo anterior al observar que las operaciones realizadas en los cuerpos de las mujeres, regularmente tienden a enfatizar, en las primeras, los rasgos de la feminidad, es decir, aumentar el tamaño de senos, de los glúteos y se afinan los rasgos faciales; en el caso de los varones, se aumentan los pectorales y bíceps, se aplican injertos en la cabellera o se aplican prótesis en el pene. Contradicción que se hace evidente en el caso de las operaciones de reasignación sexual que responden a la argumentación quienes se practican este tipo de intervenciones, de haber nacido "en el cuerpo equivocado".
Continuara...